domingo, 17 de julio de 2011

"Una vez más"

Una vez más me equivoqué, y vuelvo a mi punto de apoyo de no creer en nada, porque no puedo separar lo real de lo idóneo, porque sé que nunca lo voy a poder hacer. En el momento en el que estás leyendo esto yo habría hecho más de 1.000 millones de artículos, de anécdotas, que demostraran estos mismos instantes. Estoy loco, pero sé que lo estoy, y eso es lo que me diferencia de ustedes. Porque ustedes están un paso atrás, o uno adelante, pero esos pasos adelante no son más que equivocaciones. El punto cúlmine, el apogeo, es donde yo estoy ahora. Es el final, y no saco nada. Si sigo escribiendo no va a ser más que estupideces lo que podría decir.
Sólo para que se encierren en la mera invensión de un por qué de mis acciones, en una mentira renga, mis viejos se están separando y ésta discusión que están teniendo es la última, como "pareja". Gracias por leer algo que no le interesa... Jaja, soy un idiota, como usted.

martes, 12 de julio de 2011

"A la meva imaginació"

El último post que voy a hacer acerca de mí y nada que le embelese a la gente ajena, a menos que le gusten los psicoanálisis.
"Mi imaginación no tiene fronteras, nunca la tuvo". Eso es algo que yo creí hasta que descubrí que el universo podía no ser infinito. Yo sabía que la imaginación se basaba de las cosas que existían en el mundo, no puedo imaginarme algo hecho de cosas que nunca sentí por ninguno de mis sentidos. Pero aún así siempre me gustó "escribir" guiones: historias de todo tipo que proyectaba en muñecos a simples ilusiones visuales. Historias que sucedían aunque no me gustaran, dejaba que mi imaginación (mi subconciente) deje su huella en la historia que yo armara. Y aún sigo haciendo lo mismo, pero de formas diferentes. No juego más con los muñecos (lo que no sgnifica que no pueda crear historias con ellos), empero lo hago con las cosas que hoy me parecen importantes (aunque sepa que no lo sean). Hago mis propias series, mis propios videojuegos, mis propias novelas, mi propia vida.
En fin, mi sueño es utópico: quisiera ser un "robot" (no en el propio sentido de la palabra que significa esclavo) para ver las cosas sólo de una forma lógica y no mezclarla con mis sentimientos efímeros, pero es por el hecho de ser una utopía que lo deseo, porque aunque pudiera no cambiaría mi ser para ser un "robot", me gusta ser como soy (y sé que es un sentimiento efímero).

"No, no quiero"

"Si todo en la vida es tener que elegir, entonces yo decido no elegir". Intento ver más hayá de las cosas, inconcientemente, y sigo nublando mi juicio con más imaginación que realidad. Obnubilado y demás no encuentro la salida, y me doy cuenta que no la hay. ¿O la hay?, quién sabe... Lo único que sé es que nadie lo sabe. Todos tienen, aunque no lo quieran, un subconciente e imaginación, haciendo de ellos sólo un esclavo más de las falacias propias. Por eso es que intento basarme monótonamente a la ciencia, la salida de ese vidrio empañado, para poder ver las cosas nítidamente. Pero aún así sigo enceguecido por mis ideas, lo sé, y es por eso que escribo ahora este memorando. Sólo denoto lo conocido, pero olvidado por cada uno, durante la rutina diaria del libro de la vida.